Si expresamos lo que sentimos, siempre ganamos. |
Hay tantas palabras que nos ahorramos, no porque sean malas o porque pensemos que podemos herir a alguien; sino porque nos da miedo exponernos y dejar descubierta la parte más sensible de nuestro cuerpo y alma: el corazón. Sea por los motivos que sean, recuerda que una palabra apropiada, puede remendar muchas situaciones, cambiar tu vida e incluso la de otras personas. No te silencies más, lo que sientes decir, ¡dilo!
Debe decirse tanto lo bueno como lo malo.
Hay excelentes razones para abandonar el miedo. |
¡Tú eres quien decide!
Puedes quedarte en silencio con esos sentimientos de frustración por no hacerte escuchar; puedes quedarte con mil y un ideas sobre lo que pudo haber pasado; pero siempre será mejor no albergar sentimientos de incapacidad y vivir sin dudas. Lo maravilloso de este asunto es que está en nuestras manos, y tan sólo basta una decisión sostenida y positiva para expresar lo que queremos, ¿te animas?
¡Tan sólo dilo!
Si, puede dificultársete decir algo frente a frente, lo que le dará mayor valor a tu acción; pero si definitivamente no te sientes en capacidad, puedes escribir una nota en la que hagas claridad del por qué no lo haces en persona; en fin, puedes buscar tu manera de decir las cosas sin que tengas que guardarte tus sentimientos. No olvides que lo más importante es la sinceridad, así las palabras serán recibidas de corazón a corazón.
Con toneladas de amor...
© Lluvia
Foto Créditos: Foto 1
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