¡No vivas de las excusas de tu pareja!

El tiempo pasa y a veces se refleja en nuestro corazón: las hojas del olvido se mezclan en medio de lo que un día no muy lejano fue amor. Y es que es inevitable que el amor se esfume cuando lo único que recibimos son excusas, cuando abundan nuestros perdones y no hay ni tan siquiera una muestra clara de respeto y consideración hacia nosotr@s. Ahí es cuando nos cansamos de las disculpas y sentimos que el alma ha dejado de añorar a aquel ser.

Quien nos ama no se llena de excusas, sino de razones

Pueden existir muchas contrariedades que si se sobrellevan, fortalecerán a la pareja. Pero cuando no es así, cuando no sientes apoyo por parte de tu compañer@, cuando tod@s son comprendid@s menos tú, cuando hay tiempo para todo menos para ti, cuando las peleas aumentan, cuando no hay escucha, cuando todo es tu culpa, cuando todo se vuelve un problema... ¡Tu vida agota!

Sin darnos cuenta, nos convertimos en seres llenos de rabia y sufrimiento, seres que se sienten frustrad@s por el abandono al que se ven sometid@s... Pero después de esos momentos de confusión y decepción, empezamos a ver todo con mayor claridad: con tanta, que a veces sentimos que ya nada de lo que venga de nuestra pareja puede importarnos.

¡Merecemos amor puro!

No es gratuito que nos sintamos así: ¡estamos cansad@s! ¡Ya no queremos más excusas! Y es simple el por qué: si sólo nos dedicamos a exprimir el amor que sembramos y no nos preocupamos por abonarle, la cosecha terminará. Nosotr@s no merecemos vivir del pasado, quien tiene más excusas para justificar su comportamiento que para corregirle no es dign@ de estar a nuestro lado.

No debemos creer en ese amor ideal que nace perenne.
El amor verdadero es el que lucha, el que pelea por mantenerse con vida a pesar de las dificultades, el que no se detiene ante los obstáculos y es capaz de transformarse mil y un veces para conservar no la forma, sino su esencia.

Pero cuando no tenemos ese amor y en lugar de ello tenemos una relación que nos “pone la vida a cuadritos” y nos llena de sufrimientos y culpas, terminamos por cansarnos de las excusas y de la misma persona que amábamos.

¡No vivas de excusas por parte de quien dice amarte!
La “excusitis crónica” es una enfermedad que te puede dañar el corazón. Quien de verdad nos ama, se llena de valentía para enfrentar lo que sea necesario para conseguir nuestra sonrisa. Quien no nos ama, se inventa una excusa para no “quedar mal” ante su evidente cobardía. ¡Date el lugar que mereces! ¡Tú mereces un verdadero amor!

Con amor elevado al infinito...
© Lluvia